El hardware avanza mucho pero parece que los SATs o los servicios de asistencia de proveedores y fabricantes no lo hacen a la misma velocidad. Algo de esto está pasando con las impresoras Smart Tank
Hace unos días vendimos a una empresa una impresora HP Smart Tank de gama media. El cliente ya tenía otra igual en otra dependencia y nos pidió ese modelo en concreto. Las impresoras Smart Tank en lugar de traer los clásicos cartuchos de tinta, vienen con unos depósitos de tinta que recargamos con botellas grandes. Desde esos depósitos una mangueras flexibles alimentan a los cabezales como se puede observar en la imagen superior. Si os fijáis en dicha foto s puede observar como el tubo de arriba, el de corlo amarillo la tinta no llega al cabezal. Pues eso mismo nos pasó a nosotros a los 5 días de instalar la impresora en las oficinas del cliente, pero con el color negro.
El cliente nos llama y nos dice que la impresora no imprime en negro. La recogemos y viendo que tiene menos de una semana, tramitamos un DOA con el mayorista. Aquí tenemos una de esas cosas que marearán un poco a la nueva normativa de hacienda de control de facturas. No habíamos facturado todavía la impresora. El cliente nos había comprado más cosas que estábamos pendiente de configurar e instalar y habíamos quedado con él en facturarlo todo junto. Pero el proveedos nos pedía una factura de venta ya creada para gestionar el DOA, así que tuvimos que facturar solo la impresora. Cumplimentamos el formulario de DOA, pero nos contestan que tenemos que gestionarlo directamente con HP. Ya han tenido otras experiencias con este tipo de impresoras y en ocasiones la tinta de los depósitos se ha derramado en la caja y el transporte les ha reclamado, además de que luego HP no atienda el cambio al mayorista.
Así que contactamos con HP. A pesar de tratarse de una impresora que cuesta más de 300 Euros, que está preparada para cargas de trabajo de 10.000 páginas mensuales… HP dice que es una impresora doméstica, por lo que no podemos gestionar la garantía por el canal de empresas que suele ser más efectivo y rápido. En el canal doméstico, la persona que nos atiende tiene unas instrucciones para preparar la impresora antes de enviarla se supone que para que la tinta de los depósitos no se salga en el viaje. Pero el primer paso es hacer una manipulación en cabezal para lo cual hay que mover el cabezal al centro del carro… pero no sabe como hacerlo. Nos dice que nos llamará en un par de días, que lo va a averiguar. Y también nos dice que no es un DOA, sino que será una sustitución y puede ser que nos devuelvan una impresora remanufacturada.
Aquí uno no entiende como HP dice que un bicho recomendado para 10.000 páginas mensuales es una impresora doméstica… que me digan que familia imprime 10.000 páginas al mes. Y luego se nota, ya que el SAT de impresoras domésticas no tiene ni idea de que hacer con una Smart Tank y por último que ante un DOA te devuelvan una remanufacturada y no una impresora nueva.
Como no nos gusta estarnos quietos echamos mano de internet. Vemos que el problema que tenemos es que el tubo de tinta de color negro está lleno de aire. Así que buscamos como resolver ese problema. Por supuesto que el manual de la impresora no dice nada de ello. Pero comprobamos que es un problema muy común a tenor de toda la información que encontramos en foros y de los youtubers que explican como resolverlo con tutoriales con imágenes. En los foros de HP encontramos una forma de hacerlo… pero muy prolija y que requiere desmontar muchas piezas, usar jeringuillas… Al final localizamos a un youtuber malayo que da una solución más sencilla. En teoría una combinación de teclas en el arranque en frío de la impresora provoca un aspiración forzada por el cabezal de la impresora del aire que está en los tubos. Nos ponemos a seguir el video tutorial. Pero cuando llegamos al momento en que debe succionarse el aire aparece un mensaje en la pantalla de la impresora: cabezal de tinta negra averiado, proceda a sustituir. Entonces miramos si alguno de nuestros proveedores tenía ese cabezal y el precio. Vimos que costaba solo 10 Euros, y que si lo pedíamos ya nos llegaba al día siguiente.
Cuando llegó el cabezal lo cambiamos, repetimos el tutorial y ahora sí, con un cabezal que funcionaba desapareció el aire del tubo y la impresora volvió a la normalidad.
Y me pregunto yo el motivo por el que HP no incluye esos procedimientos en sus manuales, o por qué no enseña a sus SATs a hacerlo… al final nos costó 10 Euros, pero resolvimos el problema con el cliente que al final era de lo que se trataba. Pero pagar por algo de lo que no eres responsable (sin contar el tiempo perdido) es algo que no nos gusta. Así que me parece que las HP Smart Tank se van a la lista negra de cosas a no vender.
Lo de las impresoras, sus fabricantes y todo lo que les rodea es de juzgado de guardia, o de Ministerio de Consumo si en este país dicho ministerio sirviera para algo más que para darle una sillita de ministro a personas que necesitan un cargo si o si.