Hace unos meses cuando comenté que había visto Predestination, un lector me pasó una recomendación sobre viajes en el tiempo: La mujer del viajero en el tiempo de Audrey Niffenegger. Así que ma puse en la lista de libros. Y la semana pasada terminé de leerla.
Puesto que el título ya lo dice claro, estamos ante una novela de viajes en el tiempo. Pero no se trata de una obra de Ciencia Ficción. Digamos que la posibilidad de viajar en el tiempo que posee el protagonista no deja de ser un mecanismo que usa la autora para dar un poco de salsa a una novela sobre el amar y sobre la vida en pareja. El libro desde el principio destapa casi todas sus cartas. Así que no hago ningún anticipo cuando resumo al argumento, porque en la página uno ya se puede leer. El protagonista viaja en el tiempo, pero no puede controlar ni el momento en que inicia el viaje, ni el destino, ni cuando va a regresar… eso sí, muchos de los saltos le vienen muy bien al argumento de la novela. Pero no solo viaja en el tiempo, sino que también viaja en el espacio. Es decir, esta en Chicago en el año 1994 y aparece en California en 1985. Esto es algo que llama la atención. Si fuese un simple viajero en el tiempo seguiría en el mismo lugar, pero realmente es un viajero interdimensional.
La obra se lee bien. El arranque es bueno y a pesar de que cuenta desde el principio el “poder” del protagonista, la historia engancha. Pero en el último tercio la obra pierde fuelle… y el final… bueno parece como si la autora no supiese como terminar la novela. Y menos mal que no apareció un editor avispado que le hiciese hacer una obra abierta. Aunque hay hijos que siempre podrían hacer una segunda parte.
La novela podría ser una obra sin el viaja en el tiempo y en su lugar ser sueños. Me explico. Parece como si el protagonista en lugar de soñar, pues viaja físicamente en el espacio y el tiempo para vivir nuevas historias y purgar su subconsciente.
El libro está escrito a dos voces. Es decir, van dando su punto de vista del mismo hecho el viajero en el tiempo y su esposa. Eso al principio es curioso. Pero al final es un poco cargante.
En resumen, un libro que es recomendable. Pero con algunas trampas en la trama (hay cosas que si empiezas a hacer el croquis de los viajes del protagonista… no encajan). Pero al final es una historia de amor y de lo que significa vivir en pareja muy interesante, más que el poder del marido.
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Esta novela fue llevada al cine en 2009 con Eric Bana. Aquí se llamó Más allá del tiempo