Las pruebas

Hay veces en que no sabes si estás llamando a un SAT o es que te han pasado con Hacienda, o con un juez con ganas de ser famoso. Así que hay que demostrarlo todo. Y por supuesto que la lógica brilla por su ausencia en las cabezas de estas personas.

El otro día hacemos un pedido de tres cajas de PC exactamente iguales de gama muy alta. Mismo código de referencia, mismos accesorios, todo idéntico. Llega el pedido y los compañeros del taller se ponen a montarlo. Y la primera en la frente. Una caja lleva todos los accesorios que siempre vienen con este modelo de caja. Pero las otras dos no llevan los mismos accesorios. Y sin esos accesorios no se pueden montar los PCs.

Llamada al SAT, conversación:

• – Ese accesorio no se envía con esa caja. Se monta de otra forma, ya no lo necesitas.
  – Pues me explicas porque una caja si que lo lleva y las otras dos no.
  – Serán modelos diferentes.
  – Mira el albarán y verás que son la misma caja y el mismo conjunto de accesorios. Si por ser iguales, hasta las pedimos en el mismo color.
  – No, no podemos enviártelo, eso ya no se sirve con la caja.
  – Hemos montado ya 7 u 8 cajas iguales y siempre traía ese accesorio.
  – Imposible, en la que tienes en la tienda, te ha llegado por error ese accesorio nunca ha sido parte de esa caja.

Y al final, a tirar mano de la colección de fotos que hacemos de las cajas que montamos. Sacamos dos fotos buenas donde se ver perfectamente el accesorio que falta. Se lo enviamos al SAT. Además de fotos de la página del fabricante, donde se ve también ese accesorio.

Y ahora, que ya lo han visto, nos abren la RMA y nos van a enviar el accesorio. Ver para creer. Yo creo que Santo Tomás es el patrón de los SATs