Este fin de semana leía que la Unión Europea podría prohibir los monitores 8K el año próximo.
Han actualizado las tablas de consumo recomendadas para este tipo de electrodomésticos y resulta que han bajado el consumo. Sin embargo estas pantallas tienen más consumo ya que disponen de más chips y les hace falta una retroiluminación más potente. Pero no afecta a los televisores, sino también a los monitores con altas frecuencias de refresco a los que llevan minileds… ya que su consumo estará por encima del que marca la normativa.
Me parece algo un poco absurdo. Como siempre es una forma de ir contra el progreso. La burocracia europea está convirtiéndose cada vez más en un ente conservador y anclado en el pasado. Tal vez alguien piense que total para lo que hay que ver, para qué necesitamos un TV 8K?. Pero yo voy más allá. Los monitores que cada vez se ven mejor pueden ayudar y mucho en trabajos donde el ver más y mejor puede ser muy importante: diseño, ingeniería, biotecnología, medicina… así que no se trata solo de televisores.
Y estoy pensando que cuando vean lo que consume un Intel Core i9 o una nVidia 4090 no las prohibirán, sino que encarcelarán a sus dueños… que menos. Y aquí podemos aplicar lo mismo. Hay aplicaciones lúdicas y otras más serias donde la potencia de cálculo extra puede ser muy importante para poder avanzar en muchos campos.
Ya veremos como acaba esto, pero no soy optimista.
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A mi también me parece una norma un tanto absurda y arbitraria. ¿Tanto consume una pantalla para tener una limitación? Por lo que veo son 250 W como mucho, el doble de la tele que me acabo de comprar. Tal como comentas cualquier ordenador consume más. No ha sido 8K porque lo veo absurdo y no creo que se aprecie la diferencia respecto a un 4K y eso que estoy a 2,5 m de la pantalla.
El problema aquí es no ver que las pantallas 8K y las MicroLed tienen muchos más usos que simplemente en un TV. El poder ver cada vez mejor lo que gener un ordenador es algo muy importante.
Yo veo que la Factura de la Luz debería pagarse como el agua. Un precio reducido por el consumo medio por habitante. A partir de ahí que el precio Kw/h vaya subiendo por tramos.