Si la semana pasada os hablaba de la lectura de una novela escrita en el siglo pasado ahora toca una más moderna. Estos días he estado leyendo Proyecto Hail Mary de Andy Weir.
De Andy Weir ya comentamos aquí su primera novela El Marciano. El autor tuvo un gran triunfo con su opera prima. Además se trató de un caso donde la obra arrancó desde la red para luego ir al mundo editorial. Su éxito la llevó al cine. Esto permitió a Andy Weir dedicarse a tiempo completo a ser escritor.
Y entonces entramos en el síndrome de la segunda novela. Resulta que antes de esta novela he leído dos (no son de Ciencia Ficción) donde aparece mucho el síndrome de la segunda novela. Es decir, lo que puede costarle a un escritor que ha tenido un gran triunfo con su primera obra escribir una segunda a la altura. Andy Weir no logró concitar tantas buenas críticas con su segunda novela.
Así que con la segundo decidió no fallar. Cuando cogí el libro y leí la contraportada ya tenía muy claro que esta vez iba a volver a leer una versión del Marciano… pero en otro escenario. Y eso es este libro. Si te gustó el Marciano ya estás tardando mucho en leerla.
El libro esta muy bien escrito, pero lo veo con una perfección demasiado fría. Hay un gusto en los detalles para que no quedé nada sin explicar y todo encaje que hace que mucha gente diga que es un gran ejemplo de Ciencia Ficción Hard (vamos la que es plausible dentro de las leyes de la física que conocemos). Sin embargo en mi caso no la veo como Ciencia Ficción Hard, justamente por esos detalles que son correctos desde el punto de vista de casi todas las leyes… menos para la Ley de Probabilidades…
Hay momentos en el libro en que las casualidades se suceden a una velocidad vertiginosa. Y eso le quita gracia a la novela. Casi todo sale bien a la primera, lo cual no parece muy real. La historia está bien imaginada, pero el desenlace lo veo demasiado simple y precipitado. Hay muchas cosas en el desarrollo de la misión Hail Mary que no encajan con la personalidad de la jefa de misión (para mi el mejor personaje de la novela con mucha diferencia).
Así que creo que me separo de la corriente predominante de críticas que leí donde ponían a la novela como obra maestra. Yo la veo entretenida, fácil de leer, pero no una gran novela. Me chirrían muchas elecciones del autor al enfrentarlas justamente con la realidad.
Por otra parte, el final tampoco me gustó. Lo vi irreal y sobre todo abierto a una segunda parte demasiado ñoño y otra vez un final que no acaba de encajar con la forma de ser del protagonista.
En resumen un libro entretenido que sigue la fórmula de la primera novela del autor y con la que tratan de espantar el síndrome del segundo libro, en este caso el tercer. Recomendable si te gustó el Marciano.
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Creo que te saltaste Artemisa del mismo autor que fue la segunda novela. A mí personalmente me gustó más ésta de Hail Mary que Artemisa a pesar de sus fallos, que los tiene (como bien señalas en el post). Con Artemisa me esperaba algo tan absorvente como el Marciano y no fue así (al menso para mí).
Si, la tengo pendiente. Te cuento lo que pasó: como tengo tantas cosas pendientes y las criticas no eran buenas la dejé pasar. Con Hail Mary me picó la curiosidad por lo que comento en la entrada: el sindrome del segundo libro… vi que el argumento era muy parecido al del Marciano (astronauta solo , buano aquí si que aparece Viernes) y pensé en ver como lo habían resuelto.
Te entiendo. Hay más libros que asimilar que años de vida. Sáltate Artemisa 😉
Y que lo digas Miguel… en mi caso divido. Tengo libros que llamo fáciles para cuando estoy con algún problema de saludo o necesito desconectar. Y ahí encajé el de Hail Mary. Luego cuando estoy más tranquilo voy a por cosas más complicadas…
A mí me gustó el Marciano, pero este me pareció casi insultante. No es sólo que el personaje principal es exactamente el mismo que el del primer libro, es que todos y cada uno de los personajes están cortados por el mismo patrón. Hasta los alienígenas del espacio sideral hacen chascarrillos y zascas continuamente, llega un punto que es ridículo. Ahora entiendo por qué el primer libro tuvo tan buenas críticas: al haber sólo un personaje, no había riesgo de exponer las carencias del autor.
Yo del alienigena no quería hablar por no destapar la historia… pero tienes razón