Si Einstein hubiese trabajado en una tienda de informática

Albert Einstein desarrollo tres de sus principales teorías (entre ellas la de la Relatividad Especial) mientras trabajaba en la Oficina de Patentes de Berna (si eso de que un español no triunfa en su patria también se lo podemos decir a los alemanes).

Parece ser que a principios de siglo en la Oficina de Patentes de Berna (foto superior) se examinaban muchas patentes de sistemas de sincronización de relojes y semejantes. Y puede que ello influyese algo en los trabajos de Einstein.

Pero si el bueno de Albert en lugar de encontrar trabajo allí hubiese trabajado en una tienda de informática tal vez sus descubrimientos hubiesen llegado antes… porque la relatividad del tiempo, el precio y la capacidad nuestros clientes la tienen perfectamente desarrollada.

Como siempre algún ejemplo.

Hace unas semanas nos trae un cliente una impresora a la tienda. No consiguen que imprima nada. La revisamos y no encontramos ningún problema aparente. Vemos que es un modelo veterano y de gama baja. Así que decidimos no seguir con la reparación. A poco que invirtamos tiempo y alguna pieza… el coste será superior al de una impresora nueva. Avisamos al cliente y le pasamos varios presupuestos de impresoras de la misma marca y gama. Los precios iban de los 36 a los 58 Euros.

El cliente nos llama por teléfono para confirmar que la impresora está averiada y es más cara la reparación que comprar una nueva (no sé para que escribimos y les enviamos los mensajes con todos los detalles). Nos dice que se pensará que modelo comprarse.

Al final se pasa por la tienda. Viene acompañada por su hermano. Es una clienta, para situarnos. Nos pregunta nuestra opinión. Yo le digo que si la impresora le va a durar tanto como la que vamos a retirar que se compré la de 58 Euros. Además de que es más rápida, imprime con mayor calidad, emplea cartuchos del mismo precio, pero mayor capacidad. En ese momento el hermano decide intervenir, se trata de un hombre español que como bien es sabido nacen todos sabiendo de todo, pero sobre todo de informática.

Nos dice el hermano que para qué gastarse dinero, con lo mala que ha salido la impresora averiada que, en tres años y medio, al poco de pasarse la garantía ya está rota y además con los problemas que ha dado con los cartuchos compatibles.

Yo le digo que esa impresora tiene como mínimo 10 años y que creo que es un tiempo razonable de duración. Y que los problemas con cartuchos compatibles… pues eso pasa con muchas impresoras. Que, si quiere cartuchos baratos, pues hay impresoras algo más caras, pero con sistemas de recarga más económicos.

El hermano de la clienta sigue diciendo que la impresora no puede tener 10 año… al final mi socio se cansa de escucharlo y mira la ficha: la impresora tenía 15 años.

Vamos con una de relatividad del tiempo.

Y luego puedo seguir con los clientes que no saben sumar. Mirando la ficha de la hermana de este cliente le interesaba comprarse una impresora de 120 Euros. Modelos donde el coste por página es muy barato. Como yo estoy viendo el historial de compras de la clienta, tengo claro que le compensa el sobreprecio de compra Se lo digo. Y no repito aquí los exabruptos del hermano. Además de tiempo relativo, el dinero de los demás también es relativo para él.