Windows Vista: primeras impresiones reales

El sábado nos pusimos a instalar un Vista de verdad, es decir versión final, sobre una máquina normal y para estar bastantes horas al día con él. De momento y mientras preparo un artículo más largo con la historia de la instalación, mis primera impresiones reales.

Digo reales, porque hasta ahora habíamos instalado demos, betas… sobre máquinas para hacer pruebas, y ahora íbamos con versión definitiva. Hablando de versiones, hemos escogido la Vista Home Premium, porque pensamos que será la que de momento más ventas va a tener entre nuestro público.

El PC sobre el que íbamos a hacer la instalación es uno que usamos en la tienda para hacer los presupuestos… vamos el que está de cara al público. Lleva una placa base Abit I7, con un Pentium IV a 2,6, 1 giga de Ram, dos discos duros de 160 gigas Seagate Sata en Raid 0, regrabadora de DVD y una Ati 9000 de gráfica. Teclado y ratón inalámbricos de Microsoft. Una HP 2600 LaserJet a color y un escáner Canon Lite.

Lo primero fue hacer una copia de seguridad de todo lo que teníamos en el disco hacia el servidor de la red. Después usamos el software de MozBackup, para salvar la configuración del Firefox y del Thunderbird. Preparamos además un disco con los drivers del raid de la placa base… y a comenzar

Nos costó bastante comenzar a instalar, porque primero se nos ocurrió ver qué pasaba si pulsábamos en la opción de reparar sistema y no nos dejaba volver a atrás, al rearrancar el DVD se negaba a leer el disco de Vista (al final tuvimos que poner un lector nuevo…) y cuando conseguimos arrancar, no veía el raid. Aquí nos llamó la atención la opción de cargar controladores desde una memoria USB (ya era hora…) y tras varios intentos y a base de prueba y error, reconoció el Raid. En apenas 15′ teníamos el Windows Vista arrancando en nuestro PC.

Con la Ati 9000 no arrancaba el modo visual Aero, así que pusimos una Ati 9600 Pro que si que lo soportaba. Nos costó un poco activarlo (pero la ayuda está muy mejorada sobre la del XP…) pero al final a funcionar.  El Aero, pues bonito… dentro del estilo de un MacOsX y por debajo de un Compiz o un Beryl. Pero a la gente que viene de ver solo XP les va a resultar llamativo; útil, pues no lo sé pero parece cómodo (voy a enseñárselo a los de informática de mi empresa de por las mañanas, que siguen con resoluciones de 800×600 en monitores de 17″ y con el Windows XP con todo desactivado, vamos que se ve como un NT…).

El reconocimiento de hardware, pues regular. No vio la tarjeta de red, así que tuvimos que instalarla a mano (era un 3Com) así como el escaner y la tarjeta de sonido. Pero lo instalamos todo y a funcionar.

El Firefox y el Thunderbird arrancaron sin problemas e igualmente sin problemas pudimos restaurar las copias de seguridad que habíamos hecho previamente.

También se instaló sin pegas nuestro software de gestión (es de cosecha propia) y el Crystal Reports (que usamos para imprimir desde nuestro programa de facturación). Lo mismo que el Rklauncher que usamos como barra de arranque de programas.

Con el software de gestión hemos visto unos problemas que se producen cuando hacemos sonidos, en algunas ventanas hacemos algunos pitidos para avisar y se queda el PC como tonto durante 10″, así que de momento vamos a desactivar esto de la música. Pero tiene que ser algo producido por los drivers de la tarjeta de sonido. Con otros PCs donde ya habíamos probado este programa (con tarjetas de sonido más modernas) no había ningún problema.

Impresiones: de momento parece un XP mejorado, no termino de ver ningún cambio radical que lo haga parecer radicalmente nuevo, para mi que debería haberlo vendido como una extensión de XP (y por supuesto a menos precio…) Le veo bastante compatibilidad hacia atrás (lo cual es el punto fuerte de Windows, y a la vez su talón de Aquiles…) y buen reconocimiento de hardware.

Durante los próximos días lo someteremos a la prueba de que lo usen tres personas, durante casi 12 horas al día y ya os contaré que tal responde.