Be Quiet lleva un tiempo aumentando su gama de disipadores de procesador. Y siguiendo una senda lógica, lo que está haciendo es presentar modelos más pequeños y con menos capacidad de disipación. Alguien pensará que ése no parece el camino normal, que lo suyo sería presentar disipadores cada vez más grandes y más potentes. Pero a mi me parece lógico el planteamiento del fabricante alemán; cada vez los procesadores consumen menos, se calientan menos y a su vez los clientes quieren montarlos en cajas más pequeñas. Así que si le veo la lógica a presentar productos con buena calidad, con la garantía de silencio de Be Quiet pero en tamaños y precios más asequibles. Y dentro de este movimiento, la semana pasada se presento el Pure Rock, el disipador más sencillo de Be Quiet.
En Hardware.fr, han realizado ya un test de este disipador de BeQuiet. Lo resultados, pues ajustados, pero buenos, teniendo en cuenta que se trata de un disipador cuyo precio ronda los 30 Euros. Buenas prestaciones en el apartado sonoro y un tamaño un poquito más bajito de lo normal para facilitar su instalación en cajas más estrechas.
Características técnicas del BeQuiet Pure Rock
- Tamaño (L x W x H), (mm) 87.5 x 121 x 155
- Peso: 660 gramos
- TDP (W): 130
- Socket compatibility
- Intel: LGA 775 / 1150 / 1155 / 1156 / 1366 / LGA2011(-3) Square ILM
AMD: 754 / 939 / 940 / AM2(+) / AM3 (+) / FM1 / FM2 (+) - Ruido según carga (dB(A)) @ 50/75/100% (rpm): 19.1 / 22.1 / 26.8
- Número de aletas: 48
- Material aletas: aluminio
- Número de heatpipes: 4
- Material base: cobre
- Ventilador: BeQuiet SilentWings de 120 mm.
De momento este modelo no lo hemos montado todavía, pero otro disipador que apuntaba en esta línea de BeQuiet, como el Shadow Rock Slim, lo hemos montado en cuatro PCs la semana pasada y la verdad es que nos ha gustado mucho el rendimiento y sobre todo la relación calidad precio.