Estos días pasado estuve leyendo Polaris de Jack McDevitt. Sobre este autor ya escribí en el blog, cuando comenté su primera novela: El texto de Hércules. Luego estuve leyendo algunas de sus obras del ciclo de Las Máquinas de Dios y terminé con Un talento para la guerra.
En Polaris, el autor recupera a los protagonistas de Un talento para la guerra y escribe una novela muy parecida a ésta. Vamos, es tan parecido que yo durante varios momentos dudaba sobre si me habría equivocado y tenía que revisar el título del libro, para estar seguro de que no estaba leyendo Un talento para la guerra.
El libro se lee de forma fácil, el autor se mueve bien dentro del universo que ha creado y los personajes son muy cuadriculados, demasiado arqutípicos diría yo. El argumento es muy parecido al de la primera obra donde aparecía Alex Benedict como protagonista. Hay un misterio histórico, aparecen unos restos arqueológicos, alguien trata de matar a Alex Benedict varias veces (algunas de ellas, exactamente igual que en la primera obra) y al final éste descubre todo el pastel.
En resumen, una obra menor y que parece un calco de la primera. Poco recomendable, salvo que seas muy fan del autor.