Ergonomía para cincuentones

Hace ya muchos años en el blog hablé sobre la ergonomía de los puestos de trabajo con PCs. En esos artículos aconsejaba como organizar la mesa donde usar el ordenador para poder pasar tiempo de ocio o de trabajo sin que el cuerpo ser resienta mucho por la postura y los movimientos repetitivos. Pero esas entradas se me han quedado viejas.

La imagen que hay arriba sería la postura clásica para estar horas delante del ordenador y no levantarse baldado. Pero conforme pasan los años uno se da cuenta que debe ir cambiando algunos de los parámetros.

En mi caso llevaba un par de semanas con problemas de cuello y de espalda. Coincidieron con la llegada de los primeros fríos a mi casa. Yo en verano trabajo con el portátil en el jardín de casa. Pero al empezar a hacer menos calor entré dentro de la casa. Allí conectó el portátil a un monitor de 27″ y un teclado externo. Y desde el día que empecé a usar el PC bajo techado empezaron mis problemas de salud. Así que empecé a mirar en los movimientos que hacía. Y decidí introducir algunos cambios en la configuración. El más importante fue la posición del monitor. Lo bajé más de lo recomendable. En lugar de tener los ojos a la altura del marco superior o de la parte superior de la pantalla, lo puse entre 5 y 10 centímetros por debajo y experimenté. Al final dejando el marco unos 6 centímetros de la altura de los ojos mis problemas de espalda desaparecieron.

La explicación creo que está en la vista cansada. Ahora mismo llevo unos gafas progresivas. Esas que por la parte de abajo del cristal miras de cerca y por la de arriba miras de lejos. Eso significa que para mantener la visión horizontal con el monitor tal y como lo tenía al principio debía levantar más la cabeza. Eso repercutía en mi cuello y mi espalda. Al bajar más el monitor muevo menos los ojos para enfocar con la parte inferior de las gafas.

Así que esto de cumplir los cincuenta nos hace cambiar las posturas. Menos mal que cuando me compré el último monitor hice caso a los consejos que doy a los clientes y adquirí un modelo con un brazo que permite configurar la altura, la inclinación… y me fue fácil hacer los ajustes hasta dejarlo como menos problemas me daba.