Tirando abajo el servidor del blog… Esta semana pasada habréis notado que el blog ha estado caído de forma intermitente o funcionaba a tirones. Y como muchas veces en este tipo de desastres todo comenzó con un leve aleteo de mariposa…
Todo empezó cuando a finales del año pasado un amable lector me envía un correo indicándome que no se veían los títulos de los artículos del blog cuando entrabar a la entrada. No solo me pasó esa información sino que me indicó el CSS que provocaba el fallo. Coincidiendo con esto yo andaba mosca porque en las últimas semanas las visitas al blog habían bajado. Así que vi que el hecho de no publicar el título de la entrada penalizaba en el algoritmo de Google. Me puse pues a reparar el fallo del título de la página. Vi que realmente era un bug de Elementor (que lo usó en algunas páginas del blog) pero que no lo habían resuelto. Al final opté por una solución rápida. Modifique el nombre de un estilo en la plantilla del blog y los títulos volvieron a aparecer.
El fin de semana pasado vi que los títulos habían vuelto a desaparecer. Entonces pensé que tal vez parte del problema era que mi plantilla ya tenía unos años y a lo mejor por eso el problema con Elementor. Por lo tanto, decidí cambiar de plantilla. Para ello saqué una lista de plantilla que me gustaban y pensé en probar que tal se verían. Copie y reactive una copia de seguridad del blog de hacía unos meses en otro dominio del servidor donde tengo el blog ahora mismo. Así podía experimentar sin romper nada. Y pasé así unas horas viendo si alguna plantilla me gustaba y no me llevaba mucho tiempo el adaptarla. Al final localicé una solución al bug de Elementor para los títulos de las entradas que era simple. Puesto que ya tenía una versión de pruebas la ejecuté allí y funcionaba. Así que hice una copia del blog y luego puse el código que resolvía el problema. Todo funcionó estupendamente. Así que me dedique a otras cosas.
Tres horas después me llega un aviso de un lector del blog diciéndome que no puede acceder al mismo, que aparece un error. Yo entro y si que podía. Al final decido entrar al servidor donde lo tengo alojado… y veo que había un error general y el servidor estaba caído. Comprobé que a mi me funcionaba el blog porque la cache era la que me respondía. Así que probé a entrar directamente por línea de comandos al servidor y por ahí si que tenía acceso.
Entonces tocaba desentumecimiento general de línea de comandos y servidor Linux. Hacia meses que no me peleaba con esa configuración y a mi edad eso es mortal. Tras un rato algo perdido pude localizar el error: el disco del servidor estaba lleno. Así que me puse a buscar los ficheros que más espacio ocupaban. Por supuesto el blog clonado fue uno de los primeros que borré. Después seguí con un montón de ficheros de copia que haces por si acaso y que luego se te olvida de borrar. Con eso había liberado el 40% del disco. Así que levanté de nuevo el servidor y todo volvió a la normalidad… o eso creía yo.
Al día siguiente al levantarme tenia un par de avisos de que el blog no funcionaba. Vuelvo a entrar por la línea de comandos y tenía el disco otra vez lleno. Ahora no entendía nada. Empecé a buscar y encontré tres ficheros de log que recopilaban avisos de errores llenos. Lo curioso es que dos de esos ficheros eran del blog de un cliente que lo tenemos alojado con el nuestro y el tercero no sabía de donde venía. Los borré y el disco volvió a la normalidad. Pero el servidor no arrancaba. Al final después de consultarlo vi que, a pesar de borrar los ficheros, había procesos del servidor que los tenían cogidos y no se habían borrado de verdad. Liberé los procesos y conseguí dejar más espacio vacío en el disco: el servidor volvió a arrancar.
Por la tarde me vuelven a entrar dos correos de lectores: el blog está caído. Ahora ya iba derecho a esos ficheros y veo que están otra vez llenos. Como vamos aprendiendo ahora los vació en lugar de borrarlo y compruebo que todo arranca enseguida. Pero no me desconecto y me pongo a vigilarlos. En cuestión de minutos los ficheros empiezan a crecer y a crecer. Pero los errores venían del blog de nuestro cliente y de una versión de pruebas de un blog que monté para mí y nunca active (y que además no estaba activo entre otras cosas porque la base de datos estaba borrada). Consigo bajarme los logs y veo que se generan por dos plugins que venían de regalo con la plantilla que usó mi cliente en su blog… pero que no estaban ni activados ni en uso. Así que los desactivé y los borré. Hice lo mismo con mi blog de pruebas, lo borré entero. Pero los ficheros de logs seguían multiplicándose de nuevo. Al final tuve que desactivar todas las caches del servidor Web. Y aunque llevaba años sin hacerlo… apagarlo físicamente. Y por fin con ello los fichero de log ya se quedaron tranquilos.
Así que en estas cosas he estado dedicado estos días pasados. Todo empezó con un bug de Elementor y con una bajada de visitas en el blog. Lo bueno es que he aprendido unas cuantas cosas nuevas.
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Para otra vez, activa el logrotate, de manera que cada noche los logs del día se separan y se comprimen. Los logs son una cosa con un potencial de compresión enorme, con lo que simplemente activando esto puedes convertir gigas en KB, y evitarte estos disgustos 🙂
Gracias por el consejo Jesus, en teoría están activados. El problema que tenía es que se generaban tan deprisa que en unas horas lo llenaban todo.