Estos últimos días he tenido tres consultas de tres clientes que nos preguntaban casi lo mismo: si las temperaturas que alcanzabas sus PCs nuevos eran normales. Lo curioso es que los PCs nos los compraron alrededor de las Navidades y nos preguntaban ahora a finales de marzo, pero tiene explicación.
Los equipos se parecían mucho al que veis en la imagen superior. Sus componentes principales eran:
- Placa base con chipset Z690 o Z790 de gama alta
- Procesador: Intel Core i7 13700K
- Disipador: kit de refrigeración líquida de agua de 240mm
- Tarjeta gráfica, dos iban con AMD Radeon de gama alta y el tercero con un nVidia RTX de gama alta.
Las consultas que nos realizaron eran porque con carga máxima el procesador se acercaba o se quedaba en 100 grados. Sin carga las temperaturas del micro variaban de 45 a 50 grados. Y en uno de los casos la gráfica también se iba a los 80 grados. Y les explicamos que esas temperatura son normales con la configuración de hardware que tienen. Y que también serían normales si el micro fuese un AMD. En estos momentos el hardware del PC alcanza sus mayores rendimientos a temperaturas altas. Pero es algo que ya pasaba antes. Lo que sucede en estos momentos es que tenemos más núcleos y más transistores en los micros y se nota más.
Aquí os dejó un enlace a un artículo de Techspot donde hablan del mismo tema. Para tener una opinión de contraste.
Cuando comentamos las novedades de los últimos micros de Intel y de AMD en todos los casos indicamos que sus temperaturas de funcionamiento eran altas pero que ello era normal. Se habían diseñado así. Vamos a ver qué temperaturas podemos ver en los componentes de un PC moderno:
Lo que vemos son las temperaturas máximas que pueden alcanzar con seguridad esos componentes. Pero eso significa que están pensados para funcionar a esas temperaturas sin ningún problema. Quiero decir que si el procesador llega a los 100 grados puede aguantarlo porque está diseñado para ello. Lo mismo para los otros componentes. Pero voy más lejos. Hoy en día los componentes cuando superan sus temperaturas máximas reducen su rendimiento para nos sobrepasar esa temperatura. Si un micro supera su temperatura máxima irá bajando la velocidad de sus núcleos para mantenerse en esa temperatura. Si un disco SSD llega a su temperatura máxima hará lo mismo.
¿Cuándo debemos preocuparnos por las temperaturas en el PC?
Normalmente cuando se alcanzan altas temperaturas, pero no estamos haciendo un uso intensivo del ordenador. Es decir si arrancamos el PC y hacemos tareas ofimáticas y el procesador está a 100 grados o la grafica a 90 grados hay que buscar algún problema. Aquí podemos tener dos tipos de incidentes:
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Temperaturas anormales por averías de hardware: se nos pueden plantear varias situaciones. Voy a poner las que solemos ver en la tienda
- Ventiladores averiados: es las más típica. Un ventilador que deja de girar o bien que gira mucho más despacio. Esto suele estar causado por acumulación de polvo en las aspas y en los ejes. Esto tiene una solución fácil: cambiar el ventilador. A veces la solución no es sencilla, sobre todo en equipos veteranos: no es la primera vez que tenemos que recurrir a pegamentos epoxis para poder pegar ventiladores modernos.
- Problemas de control de velocidad de ventiladores: en equipos que gestionan la velocidad de giro de los ventiladores por la placa base o por la caja estos componentes pueden dar valores falsos que hacen girar más despacio los ventiladores.
- Colocación del PC en un sitio donde el aire no puede salir: a veces se mueve el PC y acaba en un lugar muy cerrado y donde el aire caliente no sale bien de la caja porque se ha puesto algo encima de las salidas de refrigeración. Esto es un clásico en PCs de oficinas. Alguien deja un paquete de folios encima de la salida de aire caliente de la caja…
- Estrangulamiento de algún tubo de líquido en refrigeraciones liquidas: por algún movimiento o algún usuario al tocar el interior del PC dobla mucho o deja estrangulado un tubo de la refrigeración líquida. El agua pasa más despacio y el procesador se caliente
- Avería de la bomba de agua, aquí la situación es parecida a los ventiladores, se dan más casos de fallos intermitentes (como aviso de avería gorda).
- Fugas de líquido en la refrigeración líquida: al tener menos agua el sistema refrigera peor
- Radiadores y disipadores sucios: esto afecta a los disipadores de aire y a los radiadores de agua. Van cogiendo polvo y suciedad que se adhiere encima de las aletas. Esto hace que el calor se quedan acumulado.
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Temperaturas anormales causadas por el software: podemos encontrarnos varias situaciones:
- Programas antiguos: en ocasiones programas con muchos años a sus espaldas (para mucho con juegos) que no se adaptan al hardware actual lo fuerzan y el resultado son temperaturas muy altas.
- Problemas con los drivers tanto de placa y chipset, como de gráfica. Estas semanas hemos tenido un ejemplo con problemas de temperaturas tanto en drivers de nVidia como de AMD. Pero es un clásico. Suele notarse más en portátiles.
- Ejecución de muchas tareas en segundo plano, que el usuario desconoce: aquí nos encontramos desde virus a programas que se instalaron y no se emplean, pero que están consumiendo ciclos de procesador. El cliente como no lo recuerda cree que no está usando nada de su PC y éste sin embargo tienen una elevada carga de trabajo.
- Problemas con interrupciones del sistema: algo de lo que hemos hablado otras veces. Muchas veces el síntoma principal es que el PC se calienta y hace mucho ruido… ya que el sistema tiene cargas del 100% durante mucho tiempo.
- Programas antiguos: en ocasiones programas con muchos años a sus espaldas (para mucho con juegos) que no se adaptan al hardware actual lo fuerzan y el resultado son temperaturas muy altas.
Resumiendo: los PCs de hoy en día tienen componentes con temperaturas altas, pero es algo normal: buscamos la máxima potencia de cálculo y se logra así.
Por cierto que me falta explicar el motivo por el que nos llegaron las dudas estos días: el aumento de las temperaturas hace que se note más la temperatura de los PCs y sobre todo el ruido de los ventiladores. Es decir en invierno con temperaturas ambientes bajas notamos menos estas cosas. Conforme llega el verano se ven más. Pero es algo que nos pasa todos los años. La diferencia es que este año hemos tenido (por lo menos en el Levante donde están los tres clientes que nos han preguntado) unos días casi veraniegos en marzo.,