En el mundo de la tecnología digital es muy común trabajar en fiestas. Si estás desarrollando algún proyecto ya sea de software o de hardware que involucre a un número elevado de usuarios y que conlleve cambios en los sistemas de producción, seguro que te ha pasado.
Esto nos ha sucedido a nosotros estos pasado fines de semana. Hemos estado trabajando en las Oficinas de varios clientes para cambiar sistemas de producción. Se trataba de aprovechar que teníamos fines de semana con tres o cuatro días con la empresa cerrada y sin otros empleados en ella.
La verdad es que hoy en día los horarios de trabajo cada vez son más difusos. En nuestro caso procuramos tener la tienda cerrada el fin de semana. Eso no significa que no sigamos trabajando, pero por lo menos estamos sin público.
Y cuando hay casos como los de estos fines de semana, pues uno se pone el mono de trabajo y se va el sábado el domingo y tal vez hasta el lunes a cambiar un servidor, para que el martes todos los empleados de la empresa sigan trabajando y solo noten que que los programas son más nuevos y que todo funciona más rápido.
Pero cuando estaba con proyectos más grandes en mi anterior empresa de por las mañanas ya estábamos especializados en este tipo de trabajos fuera de horario normal. Muchas veces se trataba de probar cambios ya no solo sin usuarios, sino sin clientes finales. Así nos pasó con las dos integraciones del Euro, con el efecto 2.000, con tres cambios de sistema y dos cambios de host.
En ocasiones hacíamos experimentos con red. Por ejemplo, cuando eliminamos los terminales tontos e instalamos PCs en las Oficinas hicimos eso. Escogimos tres Oficinas de la red y allí instalamos un PC con la aplicación nueva. Teníamos un par de empleados de organización e informática haciendo guardia en esas Oficinas. Y cuando no teníamos colas tratábamos de pasar las operaciones de los clientes en los PCs nuevos y comprobábamos si todo había ido bien. Si algo fallaba, teníamos un sistema de vuelta atrás y se hacía todo en el terminal antiguo.
Volviendo a este fin de semana pasado, nos sucedió una cosa que nos retrasó algo un cambio de servidor. Resulta que estábamos el gerente de la empresa y nosotros tratando de cambiar las licencias del software del servidor antiguo al nuevo. El procedimiento tenía una parte Online en la que la web del desarrollador de software debía confirmarnos los cambios. Y no conseguíamos lograr ese visto bueno. Al final comprobamos que la línea de Internet fallaba muchísimo, que había un porcentaje muy elevado de Webs a las que no teníamos acceso y la velocidad era muy baja. Como la línea la teníamos con la cablera local y conozco a algunos técnicos allí, los llamé. Resulta que ellos también estaban aprovechando el fin de semana de 4 días para cambiar y modernizar algunos componentes de hardware. Al final tuvimos que validas las licencias de software entrando con una línea 4G desde el móvil.
El gerente de la empresa donde estábamos haciendo el cambio se cabreó un poco con los chicos de la cablera. Pero como yo le dije: están haciendo lo mismo que nosotros: aprovechar el fin de semana de 4 días para hacer cambios, con la tranquilidad de que si algo no va bien a la primera sus principales clientes (las empresas) lo notarán poco, ya que la mayoría estarán cerradas.