Sumideros de productividad

El otro día leyendo un artículo en Arstechnica me vi totalmente identificado con lo que el autor comentaba: las aplicaciones (ya sean juegos u otro tipo) informáticas que a veces aparecen y capturan tu interés no dejándote hacer nada de provecho.

En el artículo de Arstechnica hablan del juego Syxti Four con una temática de construir, minar, extraer, diseñar cadenas de producción… vamos algo conforme veía los vídeos de presentación ya me estaba apeteciendo jugar. Pero me temo que me pasará como al autor: si lo instalo y comienzo una partida puedo olvidarme del resto de tareas productivas y del resto de la gente. Y eso no siempre es bueno.

Las reflexiones del autor indicando como estaba obsesionado por el juego hasta el punto de perder de vista parte de sus tareas reales (y los comentarios del artículo que van muchos en el mismo sentido) me hizo pensar en la facilidad con la que cuando estamos con el PC haciendo o tratando de hacer cosas de provecho nos es muy fácil caer en un sumidero de productividad de este tipo. A mi me pasa muy a menudo (más de lo que me gustaría) no solo con juegos, sino con más cosas, una lista corta:

1. Juegos: hace ya mucho tiempo que no instalo juegos grandes. Yo solo instalo juegos con partidas cortas e intensas. De esta manera si me da por jugar en cinco minutos me han matado y asunto solucionado. Sigo teniendo algunos juegos de estrategia (Civilization el primero) instalados en un viejo portátil que solo los arranco cuando por algún motivo (normalmente de salud) tengo que estar parado en casa sin hacer nada. Pero repito, no instalo nada que tenga partidas un poco largas.
2. Nuevos lenguajes de programación: esto reconozco que es un vicio del que me cuesta desprenderme. Leo alguna reseña sobre algún lenguaje de programación y casi siempre termino instalado el entorno de trabajo y poniéndome a hacer pruebas y testeos con él. Hay veces que se me pasan las horas viendo como hacer algo útil con ese lenguaje o como desarrollar una pequeña aplicación… y las horas se me pasan sin darme cuenta. En ocasiones viene bien, ya que muy de tarde en tarde nos piden algo y pienso en ese lenguaje o entorno que probé hace unos meses y que nos podría servir.
3. Programas y soluciones de gestión de productividad: si es otro vicio. Desde siempre me han gustado las aplicaciones digitales que son justamente para mejorar la productividad, sobre todo gestores de tareas, agendas y semejantes… no sé los que habré probado. Y ahora que la mayoría son aplicaciones web me registro en todo lo que veo del tema. Lo malo de esto es que al final ninguna me gusta. El motivo es que me gustan partes o detalles de aplicaciones diferentes… y ninguna lo tiene todo. Y usar media docena de aplicaciones es de todo menos productivo…
4. Ver vídeos de time lapse donde se construyen cosas: aquí hago como con los juegos: procuro esta los más alejado de este tipo de vídeos. Pero es algo me de vez en cuando me atrapa y me hace pasar horas sin hacer nada productivo. Los temas son muy variados: gente que se construye casas, diseño y construcción de motores, construcción de aviones, construcción de maquetas, construcciones de PCs con hardware especial… Aquí en ocasiones puedo sacar alguna idea de provecho… pero pocas.
5. Aprender sobre el trabajo de algún cliente: esto es otra cosa que en un principio puede ser productiva pero muchas veces termina en pérdidas de tiempo. Cuando algún cliente nuevo nos pide nuestra colaboración para mejorar su hardware o su software me suelo meter a ver a qué se dedica exactamente y ver que están haciendo empresas parecidas. Como digo en primer término es interesante para el trabajo… pero hay veces que voy saltando desde la tarea básica de nuestro cliente hasta ver como funciona una multinacional en este sector… y suele ser excesivo. Pero aprender es algo que no me cansa.
6. Usar aplicaciones para programar sin código: esto es una afición de estos últimos años cuando se han popularizado. Me pasa como con las soluciones de productividad, de hecho, casi siempre que me pongo a probar alguna de estas herramientas termino tratando de montar un sistema de gestión de proyectos o tareas. Pero eso de que en un rato tengas una aplicación que hace algo me atrapa y me tiene horas pegado a la pantalla del PC explorando las posibilidades de la herramienta. Y el diagnóstico es parecido a de las aplicaciones de productividad: me gustaría una herramienta que tuviese partes de otras.
7. Probar aplicaciones de software: esto es un pasatiempo desde el principio de los tiempos. Me gusta ir probando programas, no importa mucho la temática. Pero si leo reseñas de aplicaciones que me llamen la atención (que son la mayoría) ya sea por el diseño del interfaz, por la tarea que hacen… acabo instalándola y probándola. Al final tuve que montar unas máquinas virtuales con distintos sistemas operativos porque sino mi PC principal se llenaría de basura. Esto que en primera instancia no es muy productivo en ocasiones si que me ha permitido sacarle provecho: cuando algún cliente nos pide que le busquemos alguna solución a un problema y yo recuerdo una aplicación que justo hacía eso…
8. Tratar de configurar cosas que no funcionan… aunque ya no las necesite. A veces montas alguna integración, solución (ya sea solo software, solo hardware o combinación de ambas) y no consigues que funcione. Al final implantas una solución diferente que si que funciona… pero se te queda la espinita de hacer funcionar la primera idea o por lo menos conocer el motivo del fallo. Esto es una de esas cosas de las que trato de huir. Lo malo aquí no es el tiempo que pierdo tratando de solucionarlo… es que hay algunas que se me meten en la cabeza y estoy pensando a todas horas en el asunto durante varios días.

Imagino que estos problemas los tendréis vosotros también. Así que a ver si alguien en los comentarios nos cuenta cuales son sus sumideros de productividad.