¿Se necesitan procesadores de más de 6 núcleos para jugar?

A la hora de configurar un PC hay que tener en cuenta muchos y variados conceptos. Los más importantes serían el o los usos principales que le vamos a dar al ordenador y el importe que nos podemos gastar.

Nosotros en la tienda perdemos muchas ventas (y otras que ni vienen a preguntar porque piensan que no sabemos de lo que vendemos) por tratar de ajustar ambos parámetros. Así tenemos casos donde el cliente va a algo más económico que lo que le recomendamos… y al final tienen que comprar otro equipo nuevo unos meses después. Y el caso contrario, donde presupuestamos PCs suficientes para el uso que nos indican… pero el cliente (casi siempre el hijo/a) piensan que necesitan mucho más equipo.

En este último caso entran los PCs gamers. Nosotros por defecto cuando un cliente nos dice que va a jugar con el PC y que ese será el uso principal, junto con ofimática… siempre vamos a instalar un procesador con 6 núcleos, ya sea un AMD Ryzen 5 o un Intel Core i5. Ahora mismo con 6 núcleos los juegos no se ven frenados por el procesador. Pero muchas veces los clientes se van y no vuelven… porque el hijo piensa que necesita 8, 12, 16 o 22 núcleos para jugar bien. Eso es lo que le han influenciado en las redes sociales y en los vídeos de los influenciadores que no han montado un PC en su vida.

Hoy en Techspot publican una entrada muy interesante. Tratan de responder justamente a la cuestión de si con un procesador de 6 núcleos se puede jugar bien. Además aprovechan para comparar un procesador de 6 núcleos de hace un lustro con uno actual. Han revisado una batería de juegos con tres AMD Ryzen, un Ryzen 5 3600, un Ryzen 5 7600 y un Ryzen 5 7800X3D. Podemos comprobar como la diferencia entre el 7600 y el 7800X3D es mínima. Además hay que tener en cuenta la mayor caché del 7800X3D, creo que la comparación con un 7700 hubiese sido más justa.

Cada vez nos sirve menos de consuelo el comprobar como nuestros consejos están apoyados por datos empíricos y no por los dictados del anunciante de turno o por las imaginaciones del grupo de amigos. Pero como digo cada vez nos consuela menos el saber que tenemos razón… pero que así y todo los clientes piensan que no.