En mi empresa de por las mañanas han decidido mejorar su política de comunicación interna. Estamos trabajando en un proyecto de renovación tecnológica bastante gordo, así que se les ha ocurrido enviar un boletín por correo electrónico (no llega ni a lista de correo) a los participantes en el proyecto. Abrí el mensaje y en la parte de arriba había un botón para mandar sugerencias, así que sin pensarlo mucho envíe una: montar un blog para informar de los avances del proyecto. Costaría lo mismo o menos, sería más interactivo y daría una imagen como más moderna y cool (es que si lo pones en castellano ni lo miran) y proporcionaría un buen feedback de lo que estamos haciendo.
Luego un poco más tarde en un corrillo del café uno de los compañeros comentó que le había hecho gracia mi sugerencia de montar un blog, comentó posibles nombres… y en eso que vemos que algunos compañeros ponen cara de ignoración; les preguntamos que cual es el problema y nos dicen que “¿Qué es un blog?”. Así que se lo explicamos.
Se trataba de compañeros jóvenes, con carrera, con PC en casa, con internet en casa… y ninguno sabía lo que era un blog. Así que reflexioné sobre el ombligismo que suele reinar en la blogosfera, qué si los blogs son una alternativa a otros medios de comunicación, que si congresos sobre blogs, que si libros, que si los blogs tienen influencia… y cuatro personas tecnológicamente avanzadas (adivinar la carrera…) con medios, con tiempo, en un grupo de edad donde no debería haber excusas, pues no es que no leyesen blogs, es que no tenían ni idea de lo que era uno, por lo menos espero que picados por la curiosidad alguno descubra este mundo de la autopublicación.
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La gente cuando descubre por casualidad esto de la autopublicación o sienten vértigo y sus complejos con la red aumentan porque se dan cuentan que hay un tío que escribe todos los días y ellos no saben ni mandar un adjunto, jóvenes incluidos, o se fascinan y se engachan como me paso a mi…
Se necesita mucha biodramina en esto de los blogs…
Hablando de blog:
http://www.hispamp3.com/noticias/noticia.php?noticia=20061109080337
Hombre yo creo que el problema era de los cuatro pardillos informáticos… serían informáticos “funcionariales” y no “vocacionales”, y en todo caso hoy en día trabajar en informática (p.ej. de programador) te puede convertir en un auténtico cenutrio experto en pl/sql o en cobol, pero del resto nada de nada…
Hombre, por lo menos no hicieron como en mi empresa, que empezaron a llamar “weblog” al correo que enviaban con publicidad a los clientes. La primera vez me partía de risa. Luego empezó a darme vergüenza ajena y luego asco por tener a gente tan inutil dentro de la empresa dedicada a temas web.
En mi entorno de trabajo con una media de unos 27-29 años, gente joven, y que se usa internet, y que algunos incluso los tienen en casa, pasa igual. Les digo que visiten tal blog, y me ven como aun bicho raro, que si soy tal y cual.
Aun no estamos tan acostumbrados a la tendencias que se dan en la red, y se tiene la creencia que el que use estos medios es un “chalado” , “flipado” de los ordenadores o algo peor.
En fin.