El otro día tuvimos un caso más de la importancia de reflexionar sobre las prestaciones que necesitamos antes de comprar hardware nuevo. En este caso para variar la compra de una impresora de gama media-alta.
Se trata de un cliente que imprime mucho. Con esa impresora en concreto imprime de 6 a 10.000 páginas semanales. La media es de 25.000 páginas mensuales. Nos compró hace unos años una impresora de gama alta láser. Estuvimos mirando un modelo donde el precio de los consumibles (tanto tóner, como fusor) fuese el más económico dentro de que la impresora soportase ese volumen de impresión. Además que los consumibles tuviesen una buena duración para que hubiese que estar trasteándola a diario.
Hace unos meses nos llamó el cliente porque estaba pensando en comprar una nueva para asegurarse disponibilidad. De todas formas además de la impresora grande tenían otra más pequeña para alguna emergencia. Nuestro contacto en la empresa era el informático que estaba en plantilla. Le pasamos un presupuesto y se quedó pendiente de la aprobación de contabilidad y de gerencia.
Pero hace una semana nos llama el informático. Nos pregunta por el coste de los consumibles de una impresora láser. Le decimos lo que valen y el número de páginas que puede imprimir con ellos… y empieza a jurar en arameo. Resulta que había estado dos días de baja. El primer día que no fue a trabajar la impresora se paró (un problema con el fusor). Nadie se acordó de la máquina de repuesto para emergencias… ni nos llamaron a nosotros. El administrativo llamó a contabilidad y decidieron pedir una a una tienda en Internet con envío urgente. Compraron una impresora cara y potente… pero con cartuchos solo para 3.000 hojas (además protegidos para no usar compatibles) y con fusores para 30.000 hojas.
Cuando el informático nos pidió precio… resulta que el cartucho de 3.000 hojas de esa impresora cuesta más del doble que el cartucho original (y puede usar compatibles que cuestan 5 veces menos) de la impresora que se había parado. Y algo parecido con el fusor.
Así que nos pide presupuesto para una nueva con un coste por página parecido a la que tenían antes. Se lo pasamos. Pero contabilidad decía que no autorizaba la compra… ya tenían una impresora nueva en ese Departamento. Así que ha pasado un informe explicando que en cuestión de 2 meses la impresora nueva se amortizaría… además de que requiere solo una manipulación semanal… y estamos esperando a que alguien de arriba decida. Mientras cada dos días a cambiar el tóner.
Un ejemplo de la importancia de saber lo importante para uno cuando va a comprar hardware. Y también otro ejemplo de que el informático no puede caer enfermo en una empresa moderna.