Esta semana he tenido tres experiencias seguidas en las que después de perder bastante tiempo, voy a perder la venta… lo cual no es malo, lo malo es perder el tiempo invertido.
Los tres casos muy parecidos. Entre futuro cliente, recomendado por otro (si no es así, no vienen) y nos pide presupuesto de un portátil. Le preguntas, para qué lo va a usar, que se quiere gastar… y no se aclara mucho. Así que vamos dando palos de ciego, sacando varios modelos. Al final te dicen que uno de 400 Euros… haber empezado por ahí. Nada, le das los modelos que están hoy de oferta. Y entonces te dicen que es para el mes que viene o para Navidad y que compararán con lo que ven por ahí.
Y es cuando se te cae el alma a los píes. Tal y como está el mercado, los precios y modelos duran dos días. En las gamas bajas, hay mucha oferta concreta cerrada para unos días. Hay también muchas liquidaciones mientras queden modelos.
Si el cliente se va dos semanas después a una gran superficie, tendrán otras cosas, a otros precios. Pero cosas que seguro que también tenemos nosotros, dos semanas después. Nuestro mercado es muy dinámico y ágil, y eso la gente normal no lo entiende.
Hace un par de meses tuve un caso todavía más divertido. Entran unos clientes en cuadrilla (cuatro) les sacamos varios presupuestos y había una oferta de Acer que era un regalo, vamos un chollo. Uno de ellos encarga allí mismo uno de esos equipos y se lo lleva al día siguiente. Los otros tres amigos, se lo piensan y me dicen que me contestarán en dos semanas. Les advierto que es una oferta, que solo hay 300 equipos en stock… nada, se lo pensarán.
Imagino que se irían a unas cuantas superficies durante el fin de semana. No vieron nada mejor (repito que era un chollo) y volvieron el lunes a por el mismo Acer que se había llevado el amigo. Estaba 240 Euros más caro. Y se enfadaron.
Pero aquí, hay que tener claro como de rápido se mueve este mercado. Y esto es algo que juega en contra de las tiendas pequeñas. Creo que pondré otro cartel: “Pedir presupuesto, la misma semana que vaya a hacerse la compra”
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Por experiencia: los carteles no los lee casi nadie.
Lo peor es que cuando les dices lo mismo que pone en el cartel no te escuchan.
Yo he tenido TODO EL VERANO, en un cartel, en mitad de la puerta, en fondo NARANJA FLUORESCENTE, que no íbamos a abrir por las tardes durante julio y agosto -entre otras cosas porque no hay ni dios en la calle- y que si se necesitaba por algo abríamos solicitando hora… Bueno, pues no sé ni cuantos me han dicho que vinieron un día y se lo encontraron cerrado que si estábamos de vacaciones.
Ahora mismo, como siempre desde que trabajamos aquí, tenemos bien clarito que abirmos por las tardes a las 17.30h… pues ya no son 2 ni 3 los que vienen echándote en cara, a las 17.20, que les has tenido 20 minutos esperando que qué formalidad. Vamos, una se puso echa una furia hace tiempo diciendo que me iba a poner verde con mi jefe (lo cual tiene gracia teniendo en cuenta que soy yo mismo, pero bueno) porque había abierto a las 17.15… a lo que muy educamente la respondí que saliera del establecimiento y volviese dentro del horario de apertura al público que no tenía que atenderla 15 minutos antes del mismo, que figuraba en la entrada…
La gente no lee.
Tendero, en el mundo empresarial (empresas que venden a otras empresas) es habitual que al pasar un presupuesto se añade una línea tipo “Validez de la oferta: xx semanas” o “Hasta el 31-10-2008”. No sé qué tipos de problemas legales te plantearía a ti incluir algo parecido en tus ofertas (me refiero a problemas del tipo que si se agotan los 300 portátiles de que hablas y viene alguien a pedirte uno igual a ese precio tengas qeu darselo, como pasa con las ofertas de los folletos de las grandes superficies), pero podrías plantearte hacer algo parecido en tus presupuestos.
“Mi nombre es sombra” en los folletos de las grandes superficies SI pueden poner “solo 300 unidades” lo que no pueden poner (legalmente, porque en realidad lo ponen cuando les sale de los coj****) es “hasta fin de existencias”.
Si hay un número concreto de unidades y se informa de cual es no se incurre en ninguna ilegalidad. Lo que pasa es que poner el numero este, a las grandes superficies, parece que les duele o algo por el estilo…
En cuanto al tema:
No soy “tendero” soy “tecnico”, y cuando a un cliente le dejo una nota enganchada en la pantalla (imposible no verla si usas el PC) con las 4 instrucciones de noseque programa que “no le funcionaba” (del estilo de “ir al menu Archivo, configurar página, seleccionar ‘horizontal’ y aceptar) es muy normal recibir una llamada cuando él llega a su puesto de trabajo preguntandome como hacer tal cosa:
– A ver, so gilipollas, no has visto el cartelito?
– Si, pero lo he quitado y tirado a la basura porque no funciona.
– Vale, vete al menu Archivo, configurar página, selecciona ‘horizontal’ y acepta.
– Oh mira ya funciona, ya me lo podrias haber puesto asi de simple!!
En esos momentos entran unas ganas de comprar un lanzallamas y empezar a hacer “limpieza”…