Hay un chiste que escuché hace mucho tiempo y que refleja lo que nos sucede de vez en cuando en la vida cubicular de las grandes empresas: el infierno español.
El chiste dice:
“Se muere un español y trata de entrar en el cielo. Al llegar, San Pedro le dice:
– Estoy mirando lo que has hecho en la tierra, y no mereces entrar en el cielo, así que te vas al infierno.
– Pero San Pedro, ¿no hay nada que puedas hacer?
– Hoy me has cogido de buen humor, así que te dejo escoger el infierno al que vas a ir: o el español, o el alemán.
– Y ¿Cual es us diferencia?, cuéntame algo de esos infiernos
– Se parecen bastante, son dos formas de expiación de tu culpa. Mira el infierno alemán es una prisión, tu estás encerrado en una celda y todos los días a las ocho de la mañana, te llamarán a la puerta y un diablo, te traerá un boto de pintura y una brocha. Te pasarás todo el día pintando tu celda de ese color. Al día siguiente, el diablo te traerá otro bote de otro color y así irás pinta que te pinta por todo la eternidad.
– No está mal ¿y el español?
– Es lo mismo, tu estarás en la celda, pero un día no quedará pintura, otro día no hay brocha, otro día la pintura es del mismo color que el anterior, otro día al diablo se le olvidará ir…”
Pues la otra tarde pase por algo parecido. Me quedé a comer en mi empresa de por las mañanas para ver si terminaba una tarea urgente. Estaba yo solo en la sala. A las dos horas de estar allí, y con la tarea casi terminada, se va la luz. No pasa nada, tenemos un buen SAI. Me quedé sin calefacción, pero como ya es normal, saque una chaqueta que tengo para esos casos. A la media hora, se apagan los PCs de la sala, pero la luz normal no falla. No entendía nada, si tenemos un SAI enorme… llamo a mantenimiento, estaban de comida navideña. Al final me doy cuenta que algunos enchufes de la sala si que tienen corriente eléctrica.
Me llevo mi PC a esos enchufes, y cuando voy a arrancar, veo que no llega el cable de red local. Recorrido por varios cubículos y revisado de armarios… al final encuentro un cable de red bastante largo de una impresora y lo tomo prestado. Consigo arrancar el PC… y aparece un bonito error de disco duro. No puedo seguir. Llamo al SAT y no saben cuando se podrán pasar, pero seguro que esa tarde no…
Sigo mirando, y veo un par de PCs que si que tienen luz. Pero son de consultores. Al final, arranco con mi usuario uno de ellos. Resulta que en mi empresa de por las mañanas hay Active Directory y en teóría, puedo entrar en cualquier PC de la empresa con mis claves. Aunque son PCs de otra empresa, están conectados a nuestra red corporativa. Efectivamente, me reonoce el usuario y puedo entrar. Pero como soy un usuario malo, no tengo ningún privilegio en esta máquina, y no puedo ejecutar nada, no hay iconos en el escritorio, no hay menú de inicio… no puedo hacer nada.
Sigo buscando y encuentro un PC de mi empresa, sin usar. Me lo llevo a la toma de electricidad que funcionaba, le conecto todo… lo arranco, pongo mi contraseña, me conoce, carga un escritorio completo… y de momento… se para y me tira fuera. El motivo, es que detecta una sesión en el servidor abierta por ese usuario y que no se ha cerrado. Es una medida de seguridad de nuestro Departamento de Informática. Pero yo no puedo cerrar la sesión en un PC que no arranca… llamada otra vez a soporte… no está el que puede hacer eso…
Al final, he perdido una tarde entera y no he podido hacer nada de trabajo. Pero todavía hay más. Dejo para otro día lo que será volver a la mañana siguiente a pedir que me maten la sesión del servidor y que me reparen el PC, eso será otra sesión de infierno español.
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Pues se parece mucho al infierno mexicano, déjeme decirle…
Si la final somos todos familia
Yo el chiste lo conocía con “¿Cual es el mejor infierno imposible?” y la respuesta era el administrado por españoles:
Allí el castigo se trata de que cada día tenías que coger un cubo de mierda y una cuchara para comertelo entero. Así toda la eternidad. Pero el día que había mierda no había cubo, el día que había cubo no había mierda y el día que había mierda y cubo no había cuchara y claro… los condenados vivían DPM.
Por cierto, la coña proviene de Makinava “El último chorizo” el protagonista de una de las tiras mas famosas del hace tiempo difunto Ivá (Ramón Tosas Ivá) en El Juevés. Junto a otras como historias de la puta mili.