Desgastado por delante y por detrás

La verdad es que llevo unos días de reencuentro en la tienda, que no damos abasto. No para vender, que de eso no hacemos, sino para resolver dudas, incidencias, alguna que otra avería.

Así que cuando me entra alguna perla como la de la otra tarde, pues no tenemos tiempo ni para sacar la cámara e inmortalizar al PC del que voy a hablar.

Entra un cliente, que su hijo adolescente (de los adolescentes de toda la vida, vamos de 15 años, no de esos adolescentes de 40 que tanto se llevan) le da mucho tute al portátil y que éste ahora no se conecta a Internet. Me abre la bolsa de transporte, y me enseña un Acer, que tenía pinta de venir de alguna guerra y un par de postguerras, estaba realmente usado. Así que ni me planteo la garantía. Pero el cliente me indica que el portátil está en garantía. Busco en su ficha, y el portátil solo tenía 8 meses… yo no me lo creía.

Le abro la ficha de la avería y lo paso al taller. Al día siguiente desde el taller me cuentan. Resulta que al portátil le faltaban más de una docena de tornillos. Alguien lo había desmontado y había trasteado por sus tripas. En la expedición al interior de un portátil, habían llegado hasta la tarjeta de red Wifi y la habían desconectado de su zócalo. Luego lo habían vuelto a montar todo, pero no habían pinchado la tarjeta Wifi en su sitio, así que la tarjeta hacía ruido (estaba suelta) cuando movían el portátil. La conectaron y todo a funcionar.

Pero a los dos días el mismo portátil regresa a la tienda. Esta vez, le faltan dos teclas y además no arranca. Y después de hacerle la ficha al cliente, procedo a preparar la llamada al SAT de Acer, para ver si había suerte y nos cambiaban el teclado. Le doy la vuelta al teclado para tomar nota del número de serie… y estaba tan desgastada la parte posterior del aparato, que no se podían leer nada en esa parte del portátil. Ni el número de serie, ni la pegatina del Windows, ni las letras que ponen los fabricantes, con información interna… nada, estaba todo borrado.

Y yo entiendo que si alguien escribe mucho, a todas horas, pues parece plausible que las teclas estén gastadas, que el touchpad tenga más baches que un camino rural, que la pantalla esté más rayada que la libreta de caligrafía de mi hija, que el botón de arranque haya perdido el color. Pero ¿qué hacen con el portátil, para que la parte inferior esté también toda desgastada?. Solo se me ocurre que alguien escriba encima de las rodillas desnudas y que sude mucho… porque otra explicación no le encuentro.

Al final pudimos reparar el portátil sin enviar al SAT, porque no hay forma de enviarlo al SAT si no tenemos número de serie, menos mal.