Estas últimas semanas hemos tenido que asesorar, ayudar, instruir… a varios clientes para poder acceder y usar las Extranets o Intranets de sus propias empresas. Durante mucho tiempo, en pequeñas empresas y/o en Departamentos de Administraciones Públicas, Ayuntamientos, las extranets, sola las tenían que usar algunos clientes, proveedores y poco más.
Pero ahora siguiendo con la estela del ahorro de costes en empresas y en la administración, muchos empleados deben usar las extranets de sus empresas. En los casos que nos están llegando casi todos vienen por el mismo motivo: la empresa ya no le proporciona la nómina impresa en papel. Así que si desean tener la nómina, deben acceder a la Extranet de la empresa, identificarse y luego descargarse un fichero pdf con la nómina.
Y esto que es algo que parece muy simple y sencillo, pues puede complicarse mucho en la realidad. Normalmente porque en su día también se trató de ahorrar mucho en la creación de la extranet.
Así una de las primeras cosas que chocan es la dirección de de estas webs: www.miempresa.com:99987 y cosas parecidas. Muchas veces el cliente no sabe como meter esa dirección en favoritos, si la tecleas salta directamente a algo del tipo: www.miempresa:99987/%%%$$$4560asdfsseio/2343sd Y si eso que se ve en la barra del navegador, se guarda en favoritos, cuando se recupera, aparece un error, porque en su momento era una sesión temporal. Nuestra primera tarea muchas veces es crear el favorito a mano y dejárselo a la vista.
Pero una vez nuestro cliente tiene ya un acceso directo a su Extranet, siguen los problemas. Abrimos la web y de repente aparece una ventana con dibujos extraños, pero amenazantes, indicando que la página que se trata de abrir no incumple reglas de seguridad y que no debería abrirse. Muchas de estas páginas (y por cierto en webs de administraciones públicas pasa más que en las privadas) tienen o mal configurados los permisos de seguridad o están caducados… así que el navegador se queja. Si estamos seguros de que la web es correcta, pues hay que autorizar al navegador a seguir y grabar una excepción, para que no vuelva a quejarse.
Y ahora ya parece que podemos ir a la sección de recursos humanos. Pues no, antes hay que identificarse. Y corren por ahí algunas contraseñas que pecan o de excesiva complejidad o de lo contrario, contraseñas sencillas de reventar. Y casi ninguna de estas extranets permiten que el usuario se cambie la contraseña.
Ya hemos tecleado la contraseña y anda, otro error, un signo de admiración, un mensaje de error. Resulta que la web está tratando de abrir una subventana. Y claro el navegador si es moderno se mosquea. O si hay instalado algún sistema de bloqueo de anuncios y banners, pues no deja abrir esa subventana. Pero resulta que en la subventana está el menú para acceder a recursos humanos. Hay que configurar una regla para que esta web pueda abrir ventanas hijas.
Por fin, parece todo correcto, hemos llegado hasta la lista de nóminas, ya vemos un enlace para cada mes del año. Pulsamos encima de uno de ellos y aparece una página en blanco que no hace nada. Aquí normalmente el problema suele ser del PC del cliente. Un navegador lleno de barras, intoxicado de accesorios… que se muestra incapaz de llamar al Adober Reader (o al programa que lo sustituya) y no puede abrir el Pdf. O bien da un error, porque no está instalado ningún sistema de lectura de pdfs y no sabe el navegador que hacer con el fichero. Aquí, hacemos limpieza del navegador, reinstalamos el reader. Y en muchos casos instalamos otro navegador diferente al principal que usa el cliente para tener la seguridad de que todo va a ir bien.
Y llegados a este punto, ya solo falta que tengamos tinta en la impresora…
Así que algo que debería resultar sencillo, se convierte en una operación farragosa y lenta. En algunos casos nos podemos reír, por ejemplo cuando llega algún jefe de una empresa privada y nos pide ayuda. Le explicamos que si en su momento hubiese gastado algo más o hubiese buscado una empresa más serie, pues su Extranet funcionaría mejor. Pero cuando se trata de empleados públicos, pues uno se indigna con ellos, por ver lo que hacen con el dinero de nuestros impuestos.
2 Comentarios
Comentarios Cerrados
Yo para estos casos evitaría la extranet y tiraría por la calle de enmedio: por cada empleado un correo electrónico y una autorización firmada para el tratamiento de datos, y listos. Y si tienen email de empresa, pues mejor y más rápido… no sabrán diferenciar un CD de un DVD (porque se la suda, mayormente), pero lo de gestionar correos con adjuntos seguro que se lo tienen dominado, igual que se saben de memoria cómo se borra el historial del navegador 😛
Esto es el pan nuestro de cada dia. En mi curro pusieron un poste de nominas unica y exclusivamente para consultar la nomina e imprimirla. Es antivandalico, de acero con teclado y raton metalico, pantalla anti rotura… la broma son 6000€ de las arcas publicas gastadas en un bicho que nadie usa por que todo el mundo consulta e imprime su nomina desde su propio puesto o en casa.
Asi nos va.