O la que tiene todo el tiempo del mundo para no decidirse por nada…
Dentro de los tipos de clientes que pueblan los comercios (porque esta clase no es exclusiva de las tiendas de informática) destaca la indecisa. Aunque también hay indecisos, normalmente es una tipología que afecta más al género femenino y sobre todo a las hembras jóvenes recién casadas o con novios que siempre sacan como excusa: “Es que mi novio ha pensado, o a mi marido no…” pero vienen siempre solas a la tienda, así que uno al final piensa que el novio o el marido solo existen en su imaginación.
Entran y comienzan a preguntarte por un ratón y se pasan, cinco, diez, veinte minutos sopesando si será más cómodo un inalámbrico o será más interesante no ponerle pilas al ratón si compra uno de cable… Al final se decide por un inalámbrico con pilas recargables, y cuando va a llevárselo, no hay ninguno con el color que a ella le gusta. Miramos el catálogo, encontramos uno con pilas recargables, del color que quiere… y nos lo encarga. Pero dos días después te llama y te dice que su novio le ha dicho que mejor un trackball, que si los tenemos violetas; y has perdido una hora, no has vendido nada y además tienes en la tienda un ratón inalámbrico recargable de un color indefinido que vas a tardar una eternidad en poder vender.
El otro día tuvimos una de éstas, vino a por un monitor TFT y no sabía qué tamaño escoger. Le preguntamos el uso que le va a dar al monitor y le damos nuestra opinión, pero no le convence… Nos dice que quiere uno que se vea bien y no sea muy caro. Le decimos que en la gama media de TFTs hoy en día los monitores de marcas conocidas se ven todos igual, entre otras cosas porque las pantallas TFTs las fabrican casi siempre los mismos, así que puede escoger un Acer, Aoc, Benq, Lg, Samsung, Philips… sin problemas. Que los números (brillo, contraste, resolución, tiempos de refresco) de los monitores de precio similar son iguales e incluso se ven iguales; que otra cosa es que quiera gastarse más dinero, y entonces entraríamos en gama alta de esas marcas y también podríamos añadir otras marcas como Eizo, Lacie, Viewsonic… y habría que hilar más fino… pero en gama media no hay muchas diferencias.
Al final ve un LG de 19″ con una peana muy pequeña y le gustan los colores, asi que nos lo encarga. Eso fue el viernes por la tarde, después de más de una hora de ver monitores.
El domingo me entra un correo de un compañero de trabajo (el que nos la había enviado) diciendo que no pidiésemos el monitor, que todavía no estaba segura de si necesitaba un 19″ normal o un 19″ panorámico o un un 20″… y que lo había tenido a él más de media hora al teléfono con sus dudas sobre el tamaño del monitor…
10 Comentarios
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El oficio, amigo, es lo que tiene y más en un sector como el tuyo que genera tantas dudas al consumidor. La verdad es que tiene que crispar un poco el que tengan un rato dándole vueltas a lo mismo para, al final, no llevarse nada. He de reconocer que en alguna ocasión he remoloneado más de lo debido, pero siempre he terminado comprando el producto, no solo por estar convencido, sino ya por vergüenza 🙂
Eso puedes paliarlo cobrando por adelantado alguna cantidad, de tal manera que si se arrepienten por lo menos te duele menos.
Debes tener 1 paciencia de santo con gente asi.
Y digo yo… tus clientes qué piensan de qué publiques todos sus affairs aquí? 🙂
J.Martin: eso está claro, pero hay veces que la gente se pasa un poco.
Nogod: esa pregunta ya me la han hecho varias veces… digamos que no estoy destapando nada privado, son cosas que suceden en un espacio público; luego, pues las historias siempre se retuercen cambiando fechas, productos, sexo… porque bueno a veces podría alguien mosquearse… De todas maneras te puedo contar que tengo algunos clientes seguidores del blog que además se dedican de vez en cuando a traerme historias para que las cuente en éste…
Yo también he trabajado (en el pasado) en tu gremio, y vamos, yo no lo haría por el “miedo” a la reacción de la clientela.
Pero me encanta tu blog y estoy aquí todos los días para ver las novedades.
Me recuerda mis viejos tiempos… Y es extraño, porque son recuerdos que me “mosquean” como el cliente tipo de hoy, y tantos otros… jejeje, seré un masoca!
Admiro tu valor y ganas de compartir tus vivencias.
Un saludo
Tendero: te reconozco paciencia, para que nos vamos a engañar pero creo que la gente también sabe reconocer cuando un profesional les atiende con agrado y honestidad, cosa que seguramente vosotros haréis, así que supongo que al final el cliente sabrá compensar el buen trato, que no todo son los precios ¿no?
¿Harán eso también en una gran superficie? Porque con tal grado de indecisión pueden entrar a comprar bolígrafos y salir con una impresora láser en color…
nogod: de cara al público hay de todo, pero por lo menos no te aburres.
J.Martin: en muchas ocasiones el cliente recuerda tu paciencia y luego vuelven. En este caso no hemos perdido la venta, sino que la ha aplazado hasta aclarase él mismo.
XXKiss: seguro… es algo que nos ha pasado a todos, vas (no ya a la gran superficie, ponte solo en el supermercado) a por algo concreto, no les queda y sales con otras cosa que ni necesitabas…
SÃ, somos débiles… xD
Me referÃa más bien a que debe ser divertido (o surrealista) escuchar la conversación “comprador/compradora indeciso/a” y “dependiente del MediaMarkt loco porque te lleves algo a casa YA”. Quiero decir, más aún de lo habitual…
Es curioso, pero yo ese comportamiento lo habÃa visto más en hombres. Ã?ltimamente estuve intentando colocar el TFT de mi ordenador viejo y la respuesta más común entre ellos era la de “ya se lo comentaré a mi señora/novia/esposa/mujer y te contesto…”