Los discos duros en PCs se han polarizado ahora mismo. En un extremo discos SSD de alto rendimiento pero capacidad pequeña o media (ahora mismo los PCs que montamos salen casi siempre con discos de 500 gigas SSD aunque cada vez subimos más al tera) y luego tenemos discos magnéticos de alta capacidad (aquí estamos montando 6, 8 y 10 teras normalmente) para clientes que necesitan gran capacidad de almacenamiento. Para estos últimos Seagate anuncia la segunda generación del sistema HAMR para lograr discos de 30 teras y subiendo.
Del sistema HAMR hablamos hace ya tres años pero vamos a darle un repaso.
HARM es el acrónimo en inglés de Heat Assisted Magnetic Recording es decir: grabación magnética asistida por calor. Se usa una fuente de calor para aumentar la temperatura del material donde vamos a grabar los datos y así modificar la coercitividad para aumentar la densidad de los datos que vamos a grabar. De esta manera en el mismo espacio físico podemos guardar más información al disponer de más capacidad magnética para grabar. En este enlace Seagate lo explica.
Al final parece que estemos fusionando la tecnología de grabación de datos de un DVD o un BlueRay con la de un disco magnético:
Como podemos ver en la imagen superior la clave es disponer de un láser que calienta la zona del disco antes de grabar. Así aumentamos los datos que podemos guardar allí. Está tecnología se empezó a investigar hace más de una década. Pero el avance ha sido lento. Es complejo el añadir un sistema de calor que puede llegar a 400 grados que actúe en una zona muy pequeña y durante poco tiempo. Además de tener materiales especiales necesitamos fiabilidad y también disipar el calor extra que se pueda producir. Por ello los avances reales son lentos. Además de momento la velocidad de lectura y escritura de los discos HAMR es menor que la de los discos magnéticos convencionales.
Seagate ha anunciado que ya está enviando unidades de prueba a clientes escogidos (imagino que empresas con grandes centros de datos que son los candidatos ideales para ello) y que espera para finales de año tener en el mercado discos con 30 teras. La idea es llegar a los 50 teras para 2025.
Resumiendo: los discos magnéticos todavía no están muertos. De momento la relación precio/capacidad sigue estando de su lado. Y si tecnologías como la HAMR funcionan bien esta diferencia puede ampliarse más.