Ayer me encontré con una noticia que originalmente salía en el Wall Street Journal sobre informes de LG y de Whirlpool en los que indicaban que solo la mitad de sus clientes usaban la conectividad con Internet de sus electrodomésticos modernos. Y de ese 50% nos falta saber cuantos son constantes y se mantienen conectados en el futuro más allá de probar la funcionalidad al comprar el aparato.
El tema es divertido. En el comentario original en PcPerspective donde ya el título me encanta: Te dimos electrodomésticos inteligentes ¿por qué no los conectas? Indican varias razones para justamente no conectarse a Internet con estos electrodomésticos:
- Imagínate que no puedes terminar la cena… porque de repente la cocina o el horno deciden actualizarse y la red Wifi va lenta
- Tal vez tienen miedo con lo que puedan hacer los fabricantes con sus datos
- No sabemos si dentro de un par de años… no habrá drivers de conexión con esa falla todo el electrodoméstico entero se apague.
Yo añadiría algunas razones más:
- No veo claras las ventajas para conectar a Internet los electrodomésticos
- Falta una aplicación que sea capaz de hacer ver a los clientes que con esa conexión ahorrarán tiempo
- Hay servicios de conexión que conllevan pagar al fabricante
- Muchos servicios podrían ser resueltos con sistemas más sencillos, baratos y menos intrusivos. Recuerdo un aparato que tengo en casa con 17 años de vida. Hace un año parecía que dejaba de funcionar. Compré en su momento el modelo caro que venía con un procesador y una pantalla LCD. Llamé a la tienda donde lo compré y me reenviaron un manual en pdf. Allí explicaban que en caso de problemas podía activar un modo especial en el panel LCD (por supuesto en blanco y negro). Así lo hice y en la pantalla aparecieron unos códigos. Entré a la web del fabricante y al escribir allí los códigos… obtuve un reporte completo del problema. Además unas instrucciones para reparar el problema y luego para volver al panel LCD y reiniciar el equipo. Una solución de hace dos décadas que todavía funciona.
Reconozco que yo no me conectaría a Internet con un electrodoméstico. Puede ser que si haya gente que vea un avance. Un tema diferente puede ser la conexión en la red local doméstica. Aquí si veo futuro si alguien por fin tiene la bala de plata de una interoperatividad real. Con algunos clientes y amigos que gustan de este tipo de modernidades nos encontramos con problemas donde cada aparato se conecta de una manera y eso frena este uso.
Y que no nos pasé nada cuando empiecen a ponerle IA a los electrodomésticos. Y más miedo me da cuando algún político decida que si o si (como sucede con los coches) los electrodomésticos deberán conectarse a Internet y que ellos puedan controlarnos del todo.
Actualización: he leído un artículo en Hackaday donde muestran la experiencia de un usuario experto con un horno conectado a Internet. Aquí tenemos más motivos para huir de este tipo de aparatos o bien para no activar su conexión a Internet
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No se porque, pero a los informáticos nos gusta cacharrear pero luego tenemos las cosas más analógicas del mundo.
Yo tp conectaría los electrodomésticos a Internet.
Tal vez para descansar cuando llegamos a casa
Los cacharros que están conectados a internet que tengo son un robot aspiradora, un altavoz inteligente y un enchufe. El que puedas ver que hace el robot es una curiosidad que miras las primeras veces, luego solo esperas que el robot haga su trabajo. Además hay que preparar un poco el terreno si quieres que aspire bien, levantando las sillas y abriendo las cortinas para que no encuentre obstáculos. Por lo que hay que planificarlo con antelación.
El altavoz me tocó en un sorteo y poco uso le doy, para reproducir podcast lo mejor es elegirlos desde otro dispositivo, porque es demasiado complejo para que lo entienda. Así que lo de “inteligente” es limitado.
El enchufe lo compré por curiosidad y lo usaré para automatizar la carga la batería de la moto en las horas más baratas, ahora que se me acaba el contrato de tarifa fija y voy a volver al PVPC.
El tener domotizada la casa es algo que no veo necesario, el apagar y encender las luces con el interruptor no tiene ningún misterio y es más rápido que empezar a hablar. El subir y bajar las persianas automáticamente si que lo veo más interesante. Junto con un termostato conectado a un dispositivo que permita programar eventos se puede optimizar la climatización de la casa. Mi termostato de hace 10 años es digital y permite su programación. No necesita estar conectado a internet para funciona y si hay que alterar la programación es porque voy a estar en casa y quiero que se encienda la calefacción. Lo que si ha mejorado en estos años es que ahora permiten un mejor control de la temperatura al ser modulantes y no mecánicos de on/off con un margen. Pueden tener en cuenta la temperatura exterior, el sol que puede entrar por los ventanales y algún detalle más.
Todo esto mejor si funciona sin necesidad de estar conectado a internet, ya que un fallo de cualquier servicio implicado en la comunicación nos dejará vendidos y sin poder usarlo.
Yo añado otro motivo adicional, que en mi caso es el que me bloquea bastante el asunto: cada domotización es de su padre y de su madre. Tengo que tener una app de LG para la nevera, otra de Bosch para la lavadora, y otra de Electrolux para el lavaplatos. Y dios nos libre de que esas apps tengan una API o similar para coordinarlas con el resto, no, cada fabricante tiene que reinventar la rueda y ser el eje de la domótica doméstica. Con lo que, al final, no lo usa ni el tato, porque no tiene sentido.
Cosa diferente sería que la domótica de los aparatos se implementase con estándares abiertos, tipo HTTP o MQTT. Ahí sí que me plantearía pagar un plus por electrodomésticos domóticos. Sólo con que la nevera me avise cuando me dejo la puerta abierta, o que la lavadora se ponga en marcha a las horas que la luz es más barata, está más que amortizado.
Jesus: como bien dices el problema de no seguir un estandar complica mucho este tipo de soluciones.