Cuando comenté los nuevos micros de Intel de duodécima generación ya indiqué que estos procesadores podían equiparse con memoria DDR4 o con la nueva DDR5.
En las pruebas que vi por Internet parecía que en algunos programas se notaba mejora de rendimiento con la DDR5. Ahora en TechSpot han hecho una revisión (de esas que me gustan mucho y que para nuestra desgracia escasean más que nunca) donde tratan de dilucidar si un Intel de duodécima generación ejecuta de forma más rápida juegos usando memoria DDR4 o DDR5.
Como siempre el artículo es muy completo. Y no se limitan solo a la parte objetiva, sino que dan su opinión subjetiva.
Desde el punto de vista de rendimiento, salvo alguna excepción no se nota apenas subir de DDR4 a DDR5 cuando vamos a ejecutar juegos. Así que no parece una opción muy recomendable. Si además tenemos en cuenta que la DDR5 cuesta más del doble que la DDR4 y que es casi imposible de conseguir… más argumentos para quedarnos con la DDR4.
Y aquí también hay otras razones. Normalmente cuando aparece una nueva generación de memoria hasta que no pasan unos cuantos modelos no se nota mucho la mejora. Ya pasó antes. Imagino que dentro de un año si se estabiliza el stock de DDR5, bajan los precios y sube su velocidad los resultados serán otros. Pero en estos momentos mi consejo es que si vas a comprar un PC con un Intel de duodécima generación te quedes con DDR4.